Nuestro último día de estancia en Dublín empezó a las 9:30 de la mañana. A esa hora comenzó nuestra jornada con una visita a Dublinia, un museo que muestra como era la vida de los vikingos, los primeros pobladores de Dublín,
La visita es autoguiada e interactiva, ya que podíamos desde escribir nuestro nombre con los caracteres vikingos hasta vestirnos como ellos llevando una cota de malla o un casco.
Continuamos con una visita a la catedral conocida como Christchurch, en cuya cripta se encuentra los famosos gato y ratón momificados. El gato perseguía al ratón y éste se introdujo en un tubo del órgano. El gato le siguió y ambos acabaron atascados dentro del tubo dónde, con la ausencia de humedad, quedaron completamente momificados.
Después de reponer fuerzas en el parque que rodea a la Christchurch nos dirigimos hacia la escuela dónde, a partir de las 14:00 tendrían lugar las últimas lecciones. A las 18:00 ya tenía todo el mundo su correspondiente diploma con una acreditación de su nivel de inglés.
A la salida nos esperaban nuestros antiguos alumnos Miguel Campa, Antón Corpas y Elena Rego. Miguel y Elena llevan varios años viviendo y trabajando en Dublín y Antón se acercó estos días por asuntos de trabajo. Para los profesores ha sido un reencuentro inovidable con estos Luarqueses que han buscado su salida profesional en el extranjero. Nos hemos citado en Luarca para continuar recordando los tiempos en que eran alumnos del Colegio José García Fernández.
Mañana, bien de mañana, comienza nuestro viaje de regreso. Esperamos llegar a Luarca sobre las 20:30 horas, y el jueves volveremos a retomar la rutina de las clases, aunque estamos seguros de que durante mucho tiempo los temas de conversación de nuestros alumnos versarán en torno a esta experiencia.